Cueva de Valporquero - León
Travesía “Sil de las Perlas - La Covona”

Abril de 2010.

La Cueva de Valporquero se encuentra en un pequeño pueblo de León que da nombre a la misma. Una parte de esta puede visitarse de forma turística.

Es una cueva muy activa ya que por su interior transcurre un río subterráneo que hace su presencia durante la mayoría del recorrido hasta salir a un pequeño barranco que desemboca en el río Torio.

Además de la entrada turística hay otra boca llamada “Sil de las perlas” situada a unos 800 metros de la otra, dirección este, en lo alto de un peñasco y dentro de una zona de bosque por la que tanto nosotros como la mayoría de espeleólogos entramos.

Una vez dentro nos encontramos una pequeña rampa seguida de varios pozos, alguno de ellos complicado por su extremada estrechez. Desde la base del último pozo se puede escuchar el curso activo del río, es escalofriante el sonido que produce.

Después de bajar este último pozo en el que el goteo de agua es incesante, llegamos a la zona de meandros ya empapados.

Comenzamos a caminar y enseguida nos damos cuenta de que las paredes se alejan y la galería se hace más ancha, pasamos varias cascadas, algunas de ellas rapelando y otras simplemente destrepando hasta que llegamos a una gran sala; al final de esta y a unos 5 o 6 metros de altura vemos un pequeño agujero que da paso a la salida por un tubo de presión estrecho y dificultoso ya que se llena de agua y puede llegar a sifonarse.

Una vez al final de esta sinuosa galería conocida como “La M” ya podemos ver la luz del exterior, hemos llegado a la Covona; la sensación que recorre nuestros cuerpos en este momento es increíble, la imagen es espectacular.

No termina aquí nuestra actividad, continuamos por el curso del barranco ya fuera de la cueva y avanzamos superando sin problemas un par de rápeles hasta llegar a su desembocadura en el río Torio, el cual tenemos que cruzar con cuidado por la fuerza de sus aguas y su gran caudal; lo hacemos colgados de una sirga que va de una orilla a otra. Esta instalación esta preparada para cuando el caudal del río es muy elevado.

La travesía transcurrió tranquila a pesar de algún pequeño resbalón que quedo en un susto y más rápida de lo que esperábamos ya que nos encontramos la zona de los pozos ya instalada. Podemos decir que la actividad fue un éxito.

Texto y Fotos, María